Fast Check CL: Contra las “fake news”

El concepto de “fake news” se difundió en los últimos años, pero lo cierto es que noticias falsas, de todo tipo de calibres, han circulado prácticamente desde siempre. Lo que no ha existido desde siempre son los fiscalizadores que se dedican a exponer la información falsa con precisión y oportunidad, valiéndose del mismo medio en el que se propaga -Internet-, para reaccionar con rapidez e informar de verdad. Uno de esos fiscalizadores a nivel local es Fast Check CL.





Fast Check CL fue creado el 22 de octubre del 2019, en medio del estallido social. Cuatro días antes de su creación, Chile vivió intensas jornadas de protesta, que fueron acompañadas por una gran producción de desinformación y contenidos engañosos en redes sociales.

Eso motivó al periodista Fabián Padilla a crear este medio, primero solo como una cuenta de Instagram, pero rápidamente creció hasta convertirse en la web de referencia que es hoy. Su trabajo ha sido destacado y citado constantemente, siendo probablemente el reconocimiento más importante que ha recibido hasta la fecha el Premio Periodismo de Excelencia otorgado por la Universidad Alberto Hurtado, en la categoría Digital Innovación.




Con ese recorrido y autoridad, Fabián comparte algunas reflexiones en torno a la labor que realiza Fast Check.

“Creo que la 'fake news' más emblemática de la humanidad ocurrió en Estados Unidos, cuando Orson Welles interpretó La Guerra de los Mundos en la radio CBS, un 30 de octubre (Halloween) de 1938 a las 8 pm. En una época donde las familias se reunían en torno a la música y las historias que se interpretaban en la radio, ocurrió este caso rarísimo, donde la actuación fue tan creíble, que las personas pensaron que la invasión alienígena, historia creada por H.G. Wells, era real”.



El trabajo de Fast Check ha cobrado mayor importancia a medida que las informaciones falsas han ido subiendo de nivel. Para nadie debería ser algo cuestionable el daño que pueden llegar a causar las “fake news”, sobre todo si su origen está en algún referente público.

Al respecto, Fabián comenta: “Pienso en dos ejemplos que son internacionales: el primero fue cuando el ex presidente Donald Trump incitó a beber cloro para eliminar el Covid-19. Esto provocó que personas se enfermen por beberlo, lo que es sin duda muy grave, pero más importante aún, cuando el mandatario de una de las potencias mundiales invita a curar este virus a través de métodos caseros, eso llega a todos los rincones del mundo y establece una realidad en personas menos informadas”.



“El segundo, también vinculado al Covid-19, fue el brazo imantado después de ser vacunado. Es una de las noticias falsas que nace como un juego, como un 'trend' en redes sociales, cuyo daño social y sanitario nadie dimensionó”.

“Físicamente, es imposible que haya magnetismo o imantación en el brazo. Tener pegado un pedazo de metal o un teléfono responde a otras explicaciones, como humedad en el brazo o sudor, lo que podría favorecer esta adhesión. La ignorancia en temas científicos y la falta de educación profundiza una duda poco razonable. Hoy está de moda dudar de todo: incluso que la Tierra sea redonda. Dudar es el mejor hábito de la ciencia. Pero tener dudas irracionales que desafían el conocimiento acumulado por cientos de años, demuestra que nos falta mucho como sociedad. Otro factor aquí fue el efecto dominó de las redes sociales, que terminó haciendo creíble una mentira y provocando aún más dudas en las vacunas, que han sido uno los inventos más relevantes que ha tenido la humanidad en toda su historia”.




Si hablamos de las razones de que se produzca y difunda tanta información falsa -y muchas veces hasta malintencionada-, el CEO de Fast Check CL tiene su visión clara: “La proliferación de 'fake news' se debe a varios factores. Lo primero es la intercomunicación, la globalización, el Internet, las redes sociales. En otras palabras, si la Revolución Industrial, trajo un progreso infinito a nuestra sociedad, también trajo el calentamiento global, la contaminación, etc. Internet y las redes sociales, han traído progreso a la humanidad, pero también un gran problema: la desinformación”.


Por otro lado, Fabián también observa otras actitudes recurrentes poco deseables en Internet. “Hay una confusión entre tener un espíritu crítico y ser criticón. El despertar del espíritu crítico está basado en la ciencia y los hechos. Yo veo muchos criticones, es decir, personas que antes de escuchar lo que sea, tienen una opinión criticando lo escuchado. No son capaces de procesar, sino que tienen una especie de cortafuego que les hace opinar de todo y criticarlo. Esto es un signo de los tiempos, y es preocupante, porque revela que hay poca capacidad de escuchar”.

Con respecto al volumen de “fake news” que circulan en Internet, y a la forma de trabajo de Fast Check para contrastar información y exponerlas, asegura que es una actividad sin pausa.

“Es muy difícil tratar de calcular la cantidad de información falsa que circula en Internet. Fast Check CL ahora está haciendo circular una encuesta para intentar responder preguntas como esta (puede responderse en este enlace hasta el final de septiembre)”. 



“Trabajamos todos los días de forma remota, somos un equipo de cinco personas, y verificamos mucho menos de lo que nos llega. Ojala tuvieramos más fuerza y personas para verificar aún más temas. Para el estallido social nos llegaban más de 100 mensajes diarios. Hoy estamos en 20 aproximadamente. Sin embargo, una cuestión que ha cambiado es que ahora el equipo busca activamente desinformación en Internet”.


“El método y las calificaciones están en nuestro sitio web. Son públicos, porque nuestro periodismo requiere que cualquier persona que siga nuestros mismos pasos, llegue a la misma conclusión. No usamos fuentes en off o reservadas, como lo hacen otros medios. Esto es fundamental para nosotros, ya que nos permite debatir con la misma información”.

@fastcheckcl