PUMA SUEDE: DE LA HISTORIA A TUS PIES

Se hicieron conocidas en los Juegos Olímpicos de México ‘68. Fue el modelo favorito de una de las estrellas más grandes de la NBA. Ícono del hip hop y del skate. Y un clásico que no pasa de moda. Este es el recorrido que han tenido las Puma Suede.






El año es 1968. Se celebran los JJOO de México, y hay un clima de tensión en el ambiente.
Los atletas afrodescendientes de los Estados Unidos son valorados como representantes deportivos, sin embargo, viven represión y segregación día a día en su país.



Movidos por el ánimo del black power, Tommie Smith y John Carlos, quienes competían por el país del norte en los doscientos metros planos, subieron al podio descalzos, con sus manos en los bolsillos y en perfecto silencio. Smith había ganado el oro, Carlos el bronce. Cuando llegó el momento de iniciar la premiación, ambos levantaron un brazo, cuya mano estaba tapada con un guante negro de cuero.
La imagen recorrió el mundo como una legítima protesta de los deportistas afrodescendientes en su lucha por los derechos civiles. El modelo de zapatillas que ambos habían usado para ganar esas medallas, y que lucen junto a ellos en el podio eran las Puma Suede.



En 1968, no era usual coleccionar zapatillas por moda o estilo. Tenían que ser, más bien, funcionales: aportar al rendimiento deportivo. Y las Suede, originalmente llamadas Puma Crack, como una forma de asegurar que solo las usarían los mejores deportistas, eran cómodas, livianas y versátiles


El puño en alto de Smith y Carlos fue apenas el principio. Para 1972, Puma firmó su primer acuerdo comercial con un deportista de alto rendimiento: Walt “Clyde” Frazier era un ícono de la moda y una estrella de la NBA, representativo base de los Knicks por más de diez años. Frazier siempre le aseguró al mundo que él no necesitaba dinero para vestirse bien, pues el estilo era algo que se llevaba por dentro, era parte de la sangre o el espíritu. Cuando Puma le propuso firmar un contrato, él solo pidió una cosa: que ensancharan
un poco más el modelo, para hacerlo más cómodo para las canchas
de básquet. Así nació la primera variación de las Crack, que fue bautizado como Puma Clyde.
En un solo año, se vendieron dos millones de pares. Como Frazier era un fanático del estilo, solía pedir que sus Puma variaran mucho. Esto hizo que usara cerca de 390 colores distintos. La gamuza de las Suede permitía que se tiñeran fácilmente, y eso abría la puerta a cientos de variaciones.

Muchas personas ya estaban familiarizadas con las Puma Clyde. Cada tienda deportiva de los Estados Unidos tenía que tener un par en su vitrina. Sin embargo, una vez que el contrato con Frazier terminó, Puma perdió el permiso para utilizar el nombre Clyde como marca. Había llegado el momento de rebautizar al hijo pródigo de la marca: así nació el nombre de las Puma Suede.



Muchas personas ya estaban familiarizadas con las Puma Clyde. Cada tienda deportiva de los Estados Unidos tenía que tener un par en su vitrina. Sin embargo, una vez que el contrato con Frazier terminó, Puma perdió el permiso para utilizar el nombre Clyde como marca. Había llegado el momento de rebautizar al hijo pródigo de la marca: así nació el nombre de las Puma Suede.
Los dos millones de pares vendidos durante el primer año de contrato de Frazier hicieron lo suyo. Las Puma Suede se habían convertido en símbolo urbano del estilo, y los raperos de todo Nueva York pusieron sus ojos (y sus pies) sobre ellas. Los Rock Steady Crew y los New York City Breakers, dos de los colectivos de breakdancing más famosos por sus pasos en la Gran Manzana, aportaron mucho a su despegue. Por lo general, había solo una regla: a las Puma Suede se les cambiaban los cordones por unos más anchos, y listo. Ya tenías lo principal de tu indumentaria para lanzarte al baile.









En 1984, la clásica película rapera Beat Street llevó las Suede a la pantalla grande. Ahí, los breakers las usaban tal y como los fanáticos las veían en la calle. Pero no eran solo los breakers los que habían caído en la fiebre de las Suede. El grafitero Stay High 149 también se había hecho de sus propias Puma, y aportó a ponerlas de moda entre los artistas de los murales. Según él, las Suede eran sus mejores aliadas para escapar por las calles de Nueva York tras pintar una pared.  



Casi al mismo tiempo, las Suede también se revelaron como un descubrimiento ante los skaters. Primero por estilo y, después, por comodidad. Según el skater Scott Bourne, no podrían haber creado una mejor zapatilla para patinar, ni aunque lo hubiesen intentado.



Así, la Suede fue echando raíces en la vida urbana y, aún más importante, en el origen del estilo: desde entonces, ha tenido versiones hechas en colaboración con, por ejemplo, Jeff Staple, XLARGE y Santa Cruz, artistas como Rihanna y Big Sean y, más recientemente, ha tenido sus cruces creativos con el videojuego Minecraft y la serie animada Rick and Morty. También la silueta ha gozado de ediciones conmemorativas, como las Suede Power Through Peace, lanzadas para conmemorar Juegos Olímpicos del ‘68, o las Puma Suede 307, hechas para conmemorar el legado que Tommie Smith dejó en el deporte y la lucha por los derechos civiles. Las llamaron 307 en conmemoración al número que el atleta usaba para correr, y se hicieron solo 307 pares.

Las Puma Suede han tenido un largo viaje: más de seis líneas distintas, y más de 50 años de historia. Y bien sabemos que todos los clásicos están destinados a volver. Por eso hoy están aquí, a tus pies. Disponibles en bold.cl