ALGRAMO: CAMBIAR EL MUNDO CAMBIANDO EL CONSUMO

“¿Cuándo dejaste de creer que podías cambiar el mundo? Nosotros, nunca”. Así se plantea Algramo en el comienzo de uno de sus videos promocionales, y no es pura propaganda. Porque lo que podría parecer un cliché de sueño infantil, el equipo de Algramo lo ha convertido en una realidad cada vez mayor, instituyéndose en un negocio tan rentable como relevante para la sociedad.


Desde 2013 Algramo inició, de forma establecida, una misión con intenciones perfectas: ayudar, con una sola jugada maestra, a vender de forma más ecológica y a comprar más barato. Algo que sonaría a fantasía bajo el viejo paradigma de negocios (ganar todo el dinero posible a como de lugar), es una realidad concreta, que hoy se puede experimentar en cientos de almacenes a lo largo de Chile.






En corto, lo que hace Algramo es proveer de dispensadores a los almacenes y supermercados que adquieran al por mayor productos como comestibles y detergentes, para que sus clientes los puedan comprar por peso, en lugar de en un envase cerrado.

Cristóbal Undurraga, jefe de marketing de Algramo, repasa el presente y la historia de este emprendimiento que, en menos de una década, impactó mercados y conciencias. Lo primero que parte por explicar es que esto es un negocio. El rótulo de “empresa social” no implica que se trata de un servicio voluntario o que se trabaje a pérdida. Todo lo contrario, el negocio crece.



“Algramo hoy se parece a las cientos de start-ups que han nacido en Chile y el mundo con un propósito definido. Nos organizamos igual que la mayoría de las empresas jóvenes, con una estructura bastante horizontal, donde las ideas de todxs valen lo mismo y donde se trabaja con el impacto social y ambiental como objetivo principal. Nadie es voluntario y el capital se administra igual que en cualquier empresa. La única diferencia es que quienes trabajamos aquí creemos que las empresas pueden ser agentes de cambios positivos en la sociedad”.




“Hoy, son más de 1.500 almacenes que venden productos Algramo en formato retornable. Además, estamos presentes en más de 15 comunas de la Región Metropolitana con despacho a domicilio y en cuatro supermercados (La Florida, Maipú y Lo Barnechea). Quienes se suman a esta nueva forma de vender, están conscientes del tremendo problema que generan los plásticos de un solo uso y quieren ser un aporte frente a la crisis climática revolucionando la forma en que consumimos y manteniendo el plástico en la economía y fuera del medio ambiente”.

“Creemos que estamos empezando a tener un impacto positivo por la manera en que hacemos las cosas. El mercado viene haciendo lo mismo hace mucho tiempo y nosotros tenemos ganas de romper con esto, porque más que un producto, queremos vender un cambio de hábito, que al final no importa si lo haces con Algramo o no, de hecho aún hay muchas partes en que nuestro sistema ni siquiera está disponible y existen otras alternativas, e igual queremos que esas personas nos escuchen y cambien su forma de consumir. Desde que empezamos han nacido cientos de emprendimientos que se han sumado a la venta a granel con envases reutilizables y mientras más seamos, mejor. Tenemos el desafío de mantener el plástico en la economía y fuera del medio ambiente de forma urgente y necesitamos que cada día sean más las personas que se sumen a esta revolución”.

“A largo plazo, el gran salto que nos gustaría impulsar de forma colaborativa es que la norma sean los envases reutilizables, que olvidemos los plásticos de un solo uso y cambiemos 100% nuestra forma de consumir”.


Dentro de ese objetivo, algo clave es lograr que se mejoren o amplíen las posibilidades que impone el decreto 239. Este decreto solo permite dispensar productos cosméticos y de higiene personal a granel solo a los laboratorios de producción.



“El problema es que para emprendimientos como nosotros y muchos otros, certificarse como laboratorio de producción es prácticamente imposible. Por eso, lo que buscamos nosotros, es que para productos de higiene personal como el champú, bálsamo y jabón, se permita su dispensación a granel en envases reutilizables. Esto se hace en muchas otras partes del mundo y hoy tenemos la tecnología para asegurar la calidad de los productos en su dispensación, así como la trazabilidad necesaria en toda la cadena de producción y consumo. Lo que buscamos es actualizar este decreto, que impide soluciones para una de las categorías que más contamina con envases plásticos de un solo uso a nivel mundial. Lxs invitamos a firmar por esta causa en www.envase239.cl".


Conoce más de Algramo en su sitio web y en Instagram.